miércoles, 19 de diciembre de 2012

continuaciones con olorcito a sandía

¿quién es ella realmente? el momento en que la última gota de lluvia abandona a un jazmín



Hasta que aparecés vos, pulcra y reluciente, dorada,
para acercarme a la inminente humanidad que me persigue,
a lo dulce de la angustia eterna, del deseo en tu mirada


sos la dueña del miedo a ser desconocidos,
 y de los otros miedos, los que no te digo


no existís así como sos, fresca
pura sandía, rosa despacito
acá en mi continuación 



martes, 18 de diciembre de 2012

la acarameladíta




y acá estás vos para despertar este salvaje instinto de felicidad



 a veces me cuestiono si lo único
que me permite sostener este hilo de locura
   es imaginar tu risa tímida 
en las costas de mis secretos

tan deliciosa sos,
  que tu piel se me acaramela 
en el recuerdo. 

lunes, 17 de diciembre de 2012

Ciruelo primo

No sé porqué decidí no escribir lo inexorable, por cierto, el ciruelo floreció al día siguiente de que él se durmiera, en mi mente está durmiendo y es por eso que sufro menos, vivo en estado de ansiedad esperando que vuelva renacido, para mi, ¿la gente se irá a dormir eternamente para florecer al final de la eternidad?, ¿no hay jardines, ni música, ni lluvia, ni risas, ni miedos en ella?, ¿no hay nadie que me necesite tan genuinamente para despojar un caramelo de su envoltura?

No existen esas medidas y yo lo sé porque cuando te recuerdo me embarga el más fiel sentido de injusticia, me embarga sufrir tan justificadamente que alcanzaría con pensar cerca de un canario para verlo desfallecer en medio del jardín. 

¿Quién me va a amar? le pregunto de vuelta al lugar donde sólo dios y los recuerdos escuchan, no hay forma fácil de decir te extraño.

jueves, 6 de diciembre de 2012

las mariposas de la estación

Cuando me pregunten por el otoño, diré tu nombre.


El cuento decía que una mujer joven se paraba en el marco de la puerta de entrada, mirando hacía la pequeña oscuridad, pasaba su mano por el rostro feliz de la soledad y dejando sus pies desnudos daba giros llenos de gracia, de figura y excelencia para caer agotada en una alfombra vieja y desgarbada. 


También hablaba de una mujer joven que, con un ramo de jazmines se adentraba en un cementerio, miraba a los ojos del ángel guardián, sonriéndole, y seguía su camino abrazándose a la idea de que cuando todo volviera a florecer...

la historia sobre una joven con los pies lastimados de secretos ahogados que bailaba en la eterna simpleza de un rocío. La infeliz, la hermosa nunca más vista, sólo por el color de sus labios esa tarde en la estación.

martes, 4 de diciembre de 2012

Cotton Flower

''los personajes se evaden de mis libros y me interrogan''




exceso de gravedad sobre la ciudad y miles de cuerpos que transpiran al unísono, como siempre, en medio de la multitud, brillando está alguien que salió de su casa para no cambiar la historia ni la vida de nadie, esta personita lleva un frasco con estrellas de papel y me mira fijo, reprochándome que mis imágenes no son lo suficientemente hermosas.

si fuera menos feliz, escribiría más lindo.